Ya a mis 40 he aprendido algo que no conseguí nunca en un libro, pensamos que todo lo que necesitamos aprender está escrito en libros, es expuesto por profesores certificados, licenciados en materia, pero muchas veces y a pesar de pensar como muchos piensas no son solo esas las Fuentes que tenemos para aprender y evolucionar.
Por estos días cuando he sentido la atmosfera cargada me entere que estaba Mercurio retrogrado, para los que les afecta eso, pues entienden que significa, para mí fue desconocido pero comprendí que mi intuición me decía que había algo que no estaba en balance. Es increíble que cuando uno está alineado consigo mismo o con Dios, con el Universo, todo es como que te habla y te orienta. A pesar de sentir que muchas veces estas caminando en vano sigue, si comenzaste por un camino donde fue introducido por tu intuición continua, no siempre es de día, pero la luz llega siempre.
Este fin de semana tuve la suerte de tener el tiempo suficiente para crecer y entender un poco más lo que venimos a hacer aquí. Aprovechaba el fin de Semana Santa y por suerte tenia la grata e inigualable compañía de mi adorada hija, ella con 3 años me enseña lo que pocos libros y maestros me han dado. Estando con ella en el mar experimentaba lo bello que es sentir ser libre e integrado a la fuente de dónde venimos es como poder colocar tu mano y tocar a Dios, el Mar es el símbolo que por imaginación propia asocio con Dios;
¿Por qué?
Pues, Dios es todo amor, Dios es inmenso, Dios llega a todos lados, Dios es de todos, Dios es puro, Dios es indestructible y puedo seguir…El mar es todo amor, nos deleita con sus colores de azules y reflejos de tarde y es amor, El mar es inmenso, rodea todo el mundo en que vivimos, El mar también llega a todos lados no existe lugar donde alguien quede excluido del mar, si quieres ir a estar en contacto con él, solo debes acercarte a El Mar, El mar es puro, no es un producto procesado ni envasado, se limpia y cuida solo, El mar es indestructible también, aunque hoy vayas y tomes unos litros de él, y mañana otros, el seguirá siendo Mar.
Así con ese análisis, cuando voy al mar me relajo y medito sobre lo que necesite y siento que estoy con Dios y allí todo es perfecto. Mi hija me decía papi jugamos con la arena?, claro mi amor vamos a hacer castillos, entonces estuve allí haciendo castillos y aprendí que no importa que tanta arena acabes por usar el mar la vuelve a colocar en su lugar y no se incomoda, mi hija me dijo, ¿papi vamos a agarrar conchas? Y si caminamos y recogimos muchas conchas, ¿papi me acompañas a la orilla? Si mi amor claro vamos a la orilla, así solo así, ella me ensañaba como enseño nuestro maestro Jesús, con parábolas y ejemplos…Pasamos gran parte del día en el mar, entre otras más actividades y juegos que hicimos, veía los ojos resplendentes de mi hija, sentía que algo estaba por ocurrir, luego hubo un momento donde me desconecte y sentí como que era parte de lo que debía experimentar, así que mi hija comenzó a lanzarme bolas de arena y allí comenzamos con guerra de bolitas de arena, para más tarde terminar en el agua ambos metidos y ella en mis hombros feliz cantando una de sus melodías. El momento mágico llego justo cuando nos íbamos, entonces se quedo dormida y solo mirarla me hacía sentir qué bello es poder aprender.
Cuando crecí recuerdo muchas cosas que aun siguen en mi mente, recuerdo que en cumpleaños me regalaban algo a lo que anhelaba, no siempre era así, habían fechas donde por razones no se podía, entonces pues ese regalo anhelado no estaba para ese día, fuera Navidad o Cumpleaños. Recuerdo que cuando crecía, anhelaba muchas cosas como es típico de todo muchacho, queremos tener lo de moda o lo que tienen nuestros amigos, pero en ocasiones mi familia no tenia las posibilidades y pues se limitaban a dar lo que podían. Fui muy afortunado porque el decir que no tuve aquello o esto que estaba de moda fue casi en muy pocas oportunidades; aun recuerdo de algunas cosas, como el Atari, el Commodore64, la bicicleta, el viaje a Disney, y quizás algunas otras si me pongo a rebuscar en mi mente, estas que nombro venían acompañadas de algo extra, una satisfacción porque casi todos fueron regalos en momentos muy especiales para mí. No hace mucho hablando con mi padre (mi héroe) recapitulábamos aquellos viejos tiempos y sus palabras fueron encantadoras cuando de sus labios salía, es que yo no les pude dedicar mucho tiempo, me preocupaba porque pudieran tener lo necesario y quizás más para así hacerlos felices, aunque no siempre se pudo hemos sido una familia afortunada, quizás mi error fue no estar más con la familia, tu mama posiblemente hizo en repetidas oportunidades papel de mama y papa… Hoy puedo decir algo con tanta certeza, y les diré a todos los que se identifiquen con la historia que expongo, en la vida existen momentos duros, quizás pensamos que son los momentos más difíciles de la vida y en oportunidades pensamos porque nos pasa esto, porque me sucede a mi; debemos aceptar todo lo que ocurre en nuestro día a día.
Existe algo que puedo dejar como botón de oro grabado de todo esto y es un mensaje, mientras mis padres, se preocupaban de darnos a mí y a mis hermanas cosas de moda y algo de lujo, hubo algo que no sabían ellos pero lo estaban haciendo inconscientemente y ese algo es lo que vengo hoy a regalar como experiencia. Mis padres no han sido mezquinos, ni derrochadores, ni de lujos, hemos sido una familia afortunada en muchos por no decir todo y que suenen egoístas mis palabras; ellos mientras daban y daban nos daban amor y amor, y mientras no había más por dar nos daban amor, ese amor, fue grabado con tinta indeleble y todas las modas ya han pasado de moda, todo lo que en un momento fue novedad ya hoy ha dejado de ser novedoso, pero el amor es algo que jamás pasara de moda…
Entonces al llegar de regreso y cargar a mi hija en brazos sentía algo especial, mi intuición me hablaba pero era un lenguaje mudo y no entendía, y cuando mi hija abrió los ojos logre ver en aquellos ojos algo que llevare por siempre en mi. Papi, mirándome a la cara y con sus manitos en mi rostro y mirándome fijamente y suavemente me dijo…papi gracias por haberme regalado ese dia de playa, de verdad que la pase muy bien a tu lado, eres muy especial y te amo mucho, mis ojos comenzaron a producir lagrimas porque el mensaje tan bello que llevaba no pude controlarlos y de allí me miro y me dijo, que pasa papi porque lloras y le dije porque hay veces que uno llora por felicidad, y me abrazo diciéndome gracias papi, vamos al parque? Y como iba a negarme, allí me gritaba diciéndome papi corre duro como lo haces cuando ganas medallas, corre duro y enséñame a mí a correr, y al mirarla me decía así mírame, ganare medallas para ti papi….
En la vida muchas veces pensamos que es importante dar a la par a los que nuestros amigos o vecinos o familiares tienen, ya sea, zapatos, artículos deportivos, novedades electrónicas, relojes y lujos, se tiene por concepto que criar a un hijo es darle y darle cosas materiales porque se las merece, darle la ultima moda porque la televisión nos dice que hay que estar a la par de todos; le realidad de todo es que “todos” necesitamos de un regalo que es como la fuente, como Dios, y es “EL AMOR” es abundante en todos nosotros, es indestructible, es poderoso, llena a todo el que lo da y el que lo recibe, es una de las cosas que poseemos y jamás se agotara.
A todo el que se identifique de una u otra forma con mi experiencia, jamás olviden que la lección que esto me dejo es que de todo nos podemos olvidar, menos del AMOR que se da y se recibe. Si no tienes dinero, no importa, sino tienes lujo no importa, sino tienes la moda, no importa, así miles de cosas, lo que realmente importa es que siempre tengas AMOR para dar, todos tenemos y nunca se agota, regala al mundo amor siempre.

“Voy de vuelta a mi fuente”. Creeré más en mí y en mi intuición y sé que muchos lo harán también, estamos despertando poco a poco y en todas partes del mundo, tú sabes quién eres y a quien me refiero.
Namasté.
Precioso!
Mis hijos son el mejor regalo que me ha dado la vida, y siempre recuerdo las palabras de Maricruz diciendome….»deja que tengas hijos para que sepas….»
Ellos son mi vida, mis pensamientos y mi inspiracion…y es por eso que trato de darles todo el amor que puedo, pues siento que mientras amor uno les da, mas amor irradian ellos. Ademas que es algo que no tiene precio, a los hijos hay que darle calidad en vez de cantidad. Un beso enorme…
amigo Dios es amor!por amor nos creo y por amor nos dio’ a su unico hijo para que el que creyera en el se salvar y tuviera vida eterna! a su vez Jesus no s dejo amaos unos a los otros!donde no hay amor no hay vida,solo tinieblas y oscuridad! El amor es vida y todo lo puede,a demas es gratis!te da mucho y no quita nada!!
namaste
manena
🙂 Alfredo si me permites llamarte amigo, me ha conmovido tu post, que dulce
Gracias por compartir algo tan de ti, que hermosa bendicion de tres añitos tienes a tu lado, es increible las cosas que podemos aprender de ellos, si lo sabre yo.
El amor transforma todo.I Cor 13.
Saludos.